El cartel de ‘AQVA’ es una obra del pintor riojano, afincado en Ávila, Eduardo Palacios realizada sobre papel con técnica mixta, acuarela, grafito y témpera y diseñado por Esther Martín.
El simbolismo que representa es sencillo: unas manos reciben el agua desde la parte de arriba y a su vez la transmiten; una imagen que puede evocar el gesto del bautismo, incluso del bautismo de Jesús por Juan en el Jordán. Pero es sobre todo una imagen llena vida, de purificación, lo que se quiere trasmitir.
Bajo esa grafía de la palabra AQVA dispuesta estratégicamente en disposición vertical, se esconde el perfil o silueta de un pez, símbolo con el que los cristianos de la primera iglesia se reconocían.
La palabra griega pez, Ichhys, es un acrónimo formado por las primeras letras de la proclamación cristiana: Iesoús Christos Theou Hiyiós Sotér (Jesucristo, hijo de Dios, salvador).